- Productores confían en las gestiones del mandatario estatal, pero se agota el tiempo para definir el precio para las 5.5 millones de toneladas de maíz blanco.
Culiacán, Sinaloa. – La Asociación de Agricultores de Río Culiacán (AARC), sigue confiando en los buenos oficios del gobernador Rubén Rocha Moya en la gestión de la rentabilidad para el campo en el estado, pero los tiempos se agotan al estar ya por iniciar las trillas del maíz blanco y aún no se tienen precios definidos, ni contratos por parte de compradores, recalcó su presidente Enrique Riveros Echavarría.
Ante las posibles manifestaciones de organismos del sector social, dijo que analizan sumarse a ellas, al estar en espera de resultados favorables a dichas gestiones del mandatario estatal, pero la confianza y la paciencia tienen un límite ya que no se les ha clarificado la próxima comercialización lo que genera mucha incertidumbre entre las mujeres y hombres que labran la tierra, debido a que sólo hasta un 15 por ciento de la cosecha, será adquirida por Segalmex a productores con hasta 50 hectáreas o 600 toneladas al precio de garantía de 6 mil 965 pesos, pero no se ha detallado el precio para el resto de las cosechas.
“Ahorita al no haber un precio, tampoco hay un comprador y es donde nos estamos atorando; cuando ya llegue la cosecha, tenemos que empezar a recibir, pero sin saber a quién vamos a vender. ¿Cuál es el problema de esto? Que el productor toma un crédito y no recibe ingresos hasta que tiene la cosecha, prácticamente todo el año 6 u 8 meses solamente está haciendo gasto, gasto y tiene un mes de ingresos, en ese mes tiene que recuperar ese dinero y pagar todos los créditos”.
De no poder cumplir esos compromisos crediticios, el productor en tiempo y forma quedará en cartera vencida, ese es el gran riesgo que los compradores con la finalidad de adquirir las cosechas más baratas se vayan a septiembre lo que sería un escenario catastrófico porque para esas fechas los productores tendrán más costos por intereses de los créditos, de almacenamiento, y el riesgo que se colapsen las recibas por no haber suficiente cupo para las 5.5 millones de toneladas que se estiman en la entidad.
Riveros Echavarría, reprochó la inexperiencia de los funcionarios federales para atender este tipo de situaciones, ya que durante estos 4 años del gobierno federal, el mercado ha apuntalado los precios rentables por sí solos, sin necesidad de inyectarle recursos económicos, pero que este año los precios están deprimidos y no hayan qué hacer con la problemática al conjugarse la “tormenta perfecta”, una baja cotización del dólar, los industriales ya surtieron sus inventarios, precios de los granos bajos, con sobreproducción de Estados Unidos y Brasil, subrayó el directivo agrícola.
“No se hicieron las cosas como se debieron haber hecho a tiempo, lo que estamos haciendo ahorita era para haberlo empezado a hacer en agosto 2022, no se han puesto de acuerdo con los compradores, el gobierno sacó las manos de la negociación, es una tormenta perfecta que con el alza de costos y de intereses a que puede ser una problemática importante en el estado”.
Riveros Echavarría destacó que sólo la voluntad del presidente López Obrador se puede evitar la catástrofe comercial en el campo de Sinaloa, inyectándole recursos, ya que por sí solo es muy difícil lograr un precio piso de 7 mil pesos por tonelada de maíz blanco en la entidad.
Recordó que los productores de Sinaloa, atendieron el llamado de establecer más superficie de maíz blanco en el presente ciclo productivo, pero nadie quiere absorber los altos costos de producción y los precios deprimidos, al estar abiertas las importaciones de granos de dudosa inocuidad y calidad que puede comprometer la salud de los consumidores finales.